REHABILITACIÓN EN SALUD MENTAL
La rehabilitación en salud mental es un pilar fundamental en la atención integral de las personas con padecimientos mentales, buscando su máxima autonomía e integración en la comunidad. Este enfoque ha evolucionado desde modelos manicomiales hacia esquemas comunitarios, interdisciplinarios y basados en los derechos humanos.
1. Definición y Principios Fundamentales:
La rehabilitación psiquiátrica se define como el conjunto de procedimientos biológicos y sociopsicológicos que buscan crear, restablecer o preservar habilidades sociolaborales en personas con afecciones psiquiátricas que les impiden un ajuste social adecuado. Su objetivo principal es integrar a los individuos en un contexto social lo más cercano posible a la normalidad, con la participación activa de la familia y la comunidad. Los principios que rigen la rehabilitación en salud mental incluyen:
Enfoque en el sufrimiento psíquico: La atención se centra en el padecimiento subjetivo de la persona, no en la "enfermedad mental" como una entidad aislada.
Presunción de capacidad: Se parte de la presunción de capacidad de todas las personas, rechazando la estigmatización y discriminación.
Derechos humanos: La rehabilitación debe garantizar el pleno goce de los derechos humanos, evitando la segregación, la cronificación y las violaciones de derechos que pueden ocurrir en instituciones monovalentes.
Inclusión social: El objetivo es lograr la inclusión plena de las personas con padecimiento mental en la comunidad, lo que implica su participación en actividades sociales, educativas, laborales y recreativas.
Continuidad de cuidados: Se busca una atención ininterrumpida entre los diferentes niveles asistenciales (primaria, secundaria, hospitalaria, comunitaria).
2. Modalidades de Abordaje y Red de Servicios:
El modelo de atención comunitario implica la conformación de una Red Integrada de Salud Mental con base en la comunidad, que se articula con los servicios de salud general y otros sectores (educación, desarrollo social, trabajo, justicia).
Los dispositivos y servicios de rehabilitación incluyen:
Centros de Salud Mental (CSM): Ofrecen prevención y asistencia ambulatoria, incluyendo la atención al enfermo mental crónico.
Centros de Rehabilitación Psicosocial (CRPS): Recursos para el enfermo mental crónico, que buscan ayudar a recuperar la autonomía personal y social, promoviendo su mantenimiento e integración en la comunidad.
Centros de Rehabilitación Laboral (CRL): Recursos específicos de servicios sociales para recuperar o adquirir hábitos y capacidades laborales.
Hospitales de Día y Centros de Día Comunitarios: Dispositivos ambulatorios de tratamiento intensivo a tiempo parcial para recuperar capacidades y habilidades que permitan la integración en la comunidad, o para personas con padecimiento mental en situación de crisis sin criterio de internación.
Existen centros de día comunitarios especializados en población infanto-juvenil, que brindan apoyo escolar, estimulación temprana, musicoterapia, psicomotricidad y promoción de la salud a través del arte y el juego.
Dispositivos de Inclusión Habitacional: Miniresidencias, unidades hospitalarias de tratamiento y rehabilitación, unidades de cuidados prolongados psiquiátricos, pisos protegidos/supervisados, pensiones concertadas y albergues, que ofrecen alojamiento y soporte supervisado, facilitando la convivencia y la adquisición de habilidades para la vida independiente.
Equipos Comunitarios Móviles y de Apoyo Sociocomunitario: Desarrollan estrategias de intervención en la calle para personas sin hogar o brindan atención social domiciliaria para permitir a los usuarios mantenerse en su entorno familiar, facilitando la vinculación con la red de recursos.
Psicoterapia y Psicoeducación: Individual, grupal, familiar o de pareja. La psicoeducación proporciona información sobre el trastorno, su origen, prevención y manejo, involucrando a pacientes y familiares para mejorar la adherencia y la comprensión de la recuperación.
Terapia Ocupacional: Instrumentalización de ocupaciones para el tratamiento, la recuperación y la rehabilitación de habilidades sociolaborales, buscando la independencia y la valoración del potencial de la persona.
En el Hospital Psiquiátrico de Matanzas, Cuba, se observaron avances significativos en los niveles de rehabilitación de pacientes con esquizofrenia y déficit mental leve y moderado al incorporarlos a talleres de pintura, dibujo, canto, poesía y actividades participativas como "Cambiándole el color a la vida".
3. Rol del Personal de Enfermería en la Rehabilitación:
La enfermería es fundamental en la promoción y prevención de la salud mental, la investigación y la prestación de cuidados. Sus tareas en rehabilitación abarcan:
Valoración y diagnóstico: Utilización de herramientas como los diagnósticos NANDA y patrones funcionales para identificar necesidades.
Planificación y ejecución de cuidados: Desarrollo de planes individualizados y estandarizados que incluyen el manejo de medicamentos, educación para la salud, fomento de autocuidados, habilidades sociales y apoyo sociofamiliar.
Acompañamiento y apoyo: Proporcionar presencia, comprensión, apoyo emocional, escucha activa y fomentar la expresión de sentimientos.
Coordinación: Articulación con otros profesionales y dispositivos de la red para asegurar la continuidad de los cuidados.
Educación para la salud: Informar a pacientes y familias sobre la enfermedad, el tratamiento y la importancia de hábitos saludables.
4. Retos y Desafíos:
A pesar de los avances, la integración efectiva de la salud mental en la atención primaria y la rehabilitación enfrenta desafíos significativos, como la falta de recursos, la estigmatización persistente, la escasez de profesionales especializados y la necesidad de una mayor voluntad política y financiera. La persistencia de internaciones prolongadas y cronificantes en hospitales psiquiátricos monovalentes, así como la poca participación de enfermería en dispositivos de rehabilitación, son también obstáculos.
La implementación de estrategias de rehabilitación es crucial para que las personas con padecimientos mentales puedan llevar una vida plena e integrada, conforme a los principios de un modelo de atención integral y respetuoso de sus derechos.
Bibliografía:
Caballero S y Sema G. (2009). Políticas de Salud Mental en Atención Primaria, un recorrido sobre la Atención Primaria de la Salud en Santiago del Estero. Archivos de Medicina Familiar y General 6 (1): 23-29.
Colectivo de autores. (1996). CIE-10. Trastornos mentales y del comportamiento. Pautas diagnósticas y de actuación en la atención primaria. Madrid: organización mundial de la salud (MEDITOR).
Comes, Y. y Stolkiner, A. (2005). "Si pudiera pagaría": Estudio sobre la accesibilidad simbólica de las mujeres usuarias pobres del AMBA a los servicios asistenciales estatales. Salud Colectiva 12, p. 137-143. (Recuperado de http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S185116862005000100013&lng=es&nrm=iso)
Martínez O, Rodríguez O, Castro A. (2011). Rehabilitación integral del paciente psiquiátrico. Jornada científica provincial de Psiquiatría. Matanzas: Hospital Faustino Pérez Hernández.
Secretaria de Gobierno de Salud del Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación. (2019). RESOLUCIÓN N° 2019/715. PAUTAS PARA LA ORGANIZACIÓN Y FUNCIONAMIENTO DE DISPOSITIVOS DE SALUD MENTAL..