HISTORIA DEL CUIDADO
Para poder
entender el porqué de la diferenciación en las terminologías y en la evolución
del conocimiento, necesitamos comprender el contexto de la enfermería en la
historia.
La enfermería ha
experimentado un cambio espectacular como respuesta a las necesidades e
influencias de la sociedad. Un vistazo a sus inicios revela su esfuerzo
continuado en pos de la autonomía y la profesionalización. Hay aspectos
concretos de acontecimientos que han influido en la práctica de la enfermería.
Los asuntos recurrentes del papel y la condición de la mujer, los valores
religiosos (cristianos), las guerras, las actitudes de la sociedad y el
liderazgo visionario de algunas enfermeras han influido en la práctica de esta
especialidad en el pasado. Muchos de estos factores seguirán ejerciendo hoy en
día su influencia.
Primeros tiempos (5000 aC – 475 dC)
Contrariamente a la percepción de algunos,
los enfermeros profesionales son un campo exclusivamente dominado por hombres
durante gran parte de la historia de la humanidad. Cuando la primera escuela de
enfermería del mundo fue abierta en India en
el 250 a. C., debido a creencias religiosas.
La enfermería fue principalmente ejercida
por hombres durante el Imperio Bizantino. En la antigua Roma el hombre proporcionaba cuidados
enfermeros.
También se decía que el origen de las
prácticas de cuidados está ligado a las intervenciones maternales a través de
la alimentación.
En la época de Homero y
de Sócrates (400
aC) se consideraba el autocuidarse desde la perspectiva de que la limpieza
mantendría la vida y la prosperidad en una persona.
Edad Media (476-1452)
Durante la época medieval hubo numerosas
órdenes religiosas masculinas dedicadas a la enfermería. Por ejemplo, los
Hermanos Alexianos organizaron la asistencia para las víctimas de la peste
negra en el siglo XIV en Alemania.
El cristianismo y su organización tuvo vínculos históricos importantes con las prácticas de cuidados de enfermería desde los monasterios a través de las órdenes religiosas, así como desde la conquista de Tierra Santa, con las cruzadas. Como consecuencia del pensamiento medieval relacionado con la Reconquista de Santos Lugares, surgió un movimiento organizado, que cristalizó con el fenómeno histórico de las cruzadas, las cuales dieron lugar a la aparición de tres tipos de figuras: el guerrero, el religioso y el enfermero. La demanda de hospitales y sanitarios en las rutas seguidas por los cruzados propició la aparición de las Órdenes Militares dedicadas a la enfermería: los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén, los caballeros Teutónicos y los caballeros de la Orden de San Lázaro de Jerusalém.
El llamado movimiento Beguino, constituido por «mujeres santas» que cuidaban enfermos, se diferencia
dentro del entramado histórico-cristiano-caritativo ligado a los cuidados de
enfermería fundamentalmente en que no asume los votos preceptivos de las
órdenes religiosas.
Los administradores o procuradores de los hospitales eran varones, salvo en el Hospital del Rey de Burgos.
Edad Moderna (1453-1788)
Hasta el año 1500, la
escasa atención en cuanto a la reglamentación de los cuidados de enfermería,
practicados en ámbitos domésticos, propició una variedad de grupos que ejercían
estas actividades fuera de los ámbitos institucionales: nodrizas, parteras o comadronas, grupos dedicados al cuidado a domicilio y grupos dedicados a otras
prácticas sanadoras.
En el siglo XVI, la Reforma Protestante tuvo graves consecuencias para los
cuidados de salud, debido a la supresión de las instituciones de caridad. La
filosofía protestante indica que «no son necesarias las obras de caridad para
obtener la salvación». Entre los años 1500 y 1860, la
enfermería tuvo su peor momento, debido a que la idea predominante era que la
enfermería constituía más una ocupación religiosa que intelectual, por lo que
su progreso científico se consideraba innecesario. Tras la Reforma Protestante
se produjo una desmotivación religiosa para dedicarse al cuidado de enfermos
entre las personas laicas y una relegación a antiguas pacientes, presas y otras
personas de los estratos más bajos de la sociedad de la actividad de aplicar
cuidados denominado este período la «época oscura de la enfermería».
El Instituto de Diaconisas de Kaiserwerth, creado en 1836 por
el pastor protestante Theodor Fliedner (1800-1864), supuso para la enfermería el inicio
de una formación reglada, para enfermeras (el propio caos y desorganización de
los cuidados de enfermería protestantes fue lo que exigió una reglamentación
formal y específica para ejercer la profesión).
Edad Contemporánea (1789-[…..])
En el XIX, siguieron las mismas
tradiciones que las órdenes religiosas de enfermería integradas por mujeres y
fundaron hospitales y procuraron cuidados de enfermería.
El libro Notas sobre la enfermería, publicado por Florence Nightingale en 1859 —tras
sus experiencias en la guerra de Crimea—, «un texto de crucial influencia sobre la enfermería
moderna». En 1860 se
inauguró la «Escuela Nightingale de Formación para Enfermeras», la cual
constituyó una institución educativa independiente financiada por la Fundación
Nightingale. Nightingale, reformadora del concepto de enfermería, le dio
una nueva directriz a la ciencia del cuidado del ser humano, diferencia medicina de
enfermería desde el punto de vista de que la enfermería situaba al paciente en
las mejores condiciones para que la naturaleza actuase sobre él en un ambiente
limpio libre de agentes patógenos.
A principios del siglo XX, en los
Estados Unidos se admitía, por lo general, que la legislación sobre la
aprobación estatal para la Enfermería elevaría a las personas que la
practicaban a un nivel profesional mediante el establecimiento de unas normas
educativas mínimas para las escuelas de Enfermería.
Hasta la década de 1950 no se empezó a plantear en serio la necesidad de
desarrollar, articular y contrastar una teoría global de enfermería, y casi un
siglo después de Nightingale comenzaron a aparecer en la literatura
estadounidense nuevos aportes sobre la definición de la profesión y sus
funciones.
En Argentina
El primer momento, desde fines del siglo
XIX, fue clave el envión dado por Cecilia Grierson a partir de la organización
de los cursos de primeros auxilios; el segundo momento puede ubicarse en los
años cuarenta con el rol que tuvo la Fundación Rockefeller en la región y las
acciones implementadas por el peronismo, que se caracterizó por centralizar los
sistemas sanitarios de salud y, en este sentido, para el área de la enfermería
promover la creación de escuelas bajo la órbita de las agencias estatales; por
último, se alude a los cambios acontecidos en los años sesenta a la luz de las
recomendaciones de los organismos internacionales, y a las formas en que tales
acuerdos se implementaron y los cambios impuestos a la enfermería, en especial
sentido, la importancia del estatus universitario.
La Dra Cecilia Grierson, primera graduada
en medicina de la Universidad de Buenos Aires (1889), algunos años antes de
graduarse –en 1886– organizó una serie de cursos sobre el cuidado para enfermos
y sobre primeros auxilios y los dictó en las dependencias del Círculo Médico de
la Capital. Esas clases estuvieron destinadas al personal que ejercía en los
hospitales porteños y algunas de ellas tuvieron lugar en los consultorios de
los colegas de Grierson que apoyaron su iniciativa pues consideraban necesario
formar profesionales en enfermería o, al menos, instruir al personal que se
ocupaba de esas tareas. Estas clases fueron el inicio de la Escuela de
Enfermeras, Enfermeros y Masajistas de la Ciudad de Buenos Aires; sin embargo,
fue reconocida como tal en el año 1892.
Asimismo, también se encontraban los
cursos que se dictaron por parte de los hospitales de las comunidades
inmigratorias o religiosas, como la Escuela de Enfermería del Hospital
Británico (1890) o la Escuela de Enfermeras de las Obras de Conservación de la
Fe (1914), que conformaron un conjunto de espacios formativos en los cuales las
mujeres ganaron un espacio de capacitación y de trabajo.
Grierson estuvo influenciada por el
sistema creado por Florence Nightingale, en 1860, en el Hospital Saint Thomas
de Londres. La llamada “mujer de la lámpara” diseñó un dispositivo de
capacitación profesional para poder quebrar la larga tradición ligada al
empirismo y al fuerte sesgo religioso. Su propuesta se fundó sobre tres
pilares: la dirección de las escuelas sería ejercida por una enfermera y no por
un médico; la selección de las candidatas tendría que centrarse en aspectos
físicos, morales, intelectuales y profesionales, y allí debería impartirse una
enseñanza metódica y constante en los aspectos tanto prácticos como teóricos.
La implementación en las salas hospitalarias de un estricto método de limpieza
y aireación motivó una reducción de los índices de mortalidad por infecciones.
A partir de 1920, y en línea con lo
sucedido en otras latitudes, la Cruz Roja Argentina tuvo un rol destacado en la
formación de recursos humanos, dado que fundó la primera Escuela de Enfermeras
de esta institución.
La Universidad de Buenos Aires en 1924
crea la Escuela de Nurses, impulsada al interior del Instituto de Medicina
Experimental, fue un espacio de capacitación feminizado y que, por lo menos en
términos enunciativos, se postuló para algunas dolencias crónicas tales como el
cáncer.
Sobre estas ideas las mujeres formadas
bajo instancias de la Cruz Roja, las agencias estatales, las comunidades
étnicas basaron su atención en las ideas de cuidado amoroso, la caridad y la
dádiva y, con algunos cambios, estos conceptos perduraron durante el transcurso
del siglo XX. El vestuario de las enfermeras diplomadas tuvo una ligazón con
los hábitos de las religiosas. La presencia de personal religioso, los rituales
ligados a la vida y a la muerte y la simbología católica siguió teniendo un
acentuado peso en los hospitales públicos, el vestido blanco y la cofia se
constituyeron en el paradigma del cuidado y del prestigio profesional. La cofia
estaba considerada como un elemento de distinción social y reconocimiento. La
presencia masculina tendió a ser invisibilizada en la historia de la enfermería,
la tendencia muestra el triunfo del modelo de feminización.
En la etapa anterior la prioridad en la
formación fue la emergencia sanitaria, los primeros auxilios y la atención
hospitalaria, en esta segunda etapa la asistencia se articuló con la faz
preventiva y la preparación profesional para salir de las unidades
hospitalarias y ocuparse de la prevención, la atención y derivación a los
centros hospitalarios, teniendo como eje de atención los espacios urbanos como
los rurales y las preocupaciones de las enfermedades epidémicas,
infectocontagiosas y endémicas y crónicas. La Fundación Rockefeller (FR) en
América Latina difunde la necesidad de incrementar la cantidad de enfermeras
profesionales y mejorar su capacitación, con una base educativa previa, con una
inclinación científica y jerarquizar el ejercicio de la misma desde el punto de
vista del estatus profesional. La organización de programas específicos de
salud pública y de enfermería surgió en Europa en el siglo XIX
En el s. XX se inician cursos en Estados
Unidos donde la mayoría de los líderes en salud pública y en enfermería fueron
capacitados, se suma a la asistencia hospitalaria, atención domiciliaria,
enseñanza de higiene personal y prevención, formación de un perfil de
asistencia sanitaria de difusión a espacios urbanos y rurales.
En 1940 se crea la primera escuela
universitaria de enfermería en la Facultad de Medicina de la Universidad
Nacional del Litoral que solo duró tres años, y dio inicio a redes locales,
nacionales internacionales, internado obligatorio, rotación por los hospitales,
servicios sanitarios, control y prevención.
La Secretaría de Salud Pública impulsó la
Escuela Superior (1947), se consideraba a la mujer especialmente capacitadas en
función de las nociones de género imperantes en la época. Más tarde la
Fundación Eva Perón fundó la Escuela de Enfermeras. Ambas escuelas mejoraron la
capacitación y brindaron una formación que apuntó a la atención y al cuidado de
las personas hospitalizadas y a las tareas de prevención.
En Santa Fe, en 1949, el Ministerio de
Salud Pública y Bienestar Social creó un Centro de Enseñanza para Enfermeras
Rurales.
En 1951, se crea la Escuela Mixta de
Enfermeros en San Rafael, Mendoza.
El curso de visitadoras de Higiene Social,
que se dictaba en el Instituto de Higiene de la Universidad de Tucumán, se
transformó en carrera de Nurses y Visitadoras de Salud Pública en 1952,
antecedente directo de la Escuela de Enfermería Universitaria, en 1954 en la
misma provincia. Después de 1955 se registró el mismo proceso en la Universidad
de Córdoba (1956), en la de Santa Fe (1958) y en la de Buenos Aires (1960). A
pesar del impulso que tuvo la formación de la enfermería asociada a los
espacios universitarios, para 1967 las egresadas representaban apenas el 1% en
ese año, las enfermeras egresadas de Diplomado de Salud Pública de la Escuela
de Salud Pública de la Universidad de Buenos Aires observaban que las
retribuciones eran muy bajas y no se contemplaban incentivos económicos en
función del nivel de capacitación requerida.
En la actualidad
Las asociaciones profesionales: Han sido y siguen siendo grandes impulsoras del cambio
y de la calidad en la profesión.
En 1965 la Asociación Americana de
Enfermería (ANA), proponía “una escuela de enfermería independiente de los
organismos de servicio, pero que proporcione formación para el servicio, con
enfermeras educadoras competentes, y oportunidades de aprendizaje bien
seleccionadas. El desarrollo del estudiante como persona, la dignidad del
paciente como ser humano, la provisión de enfermería como servicio comunitario,
e institucional, la higiene ambiental, el cuidado personal. La dirección de
enfermería a cargo de enfermeras, el modelo de la enfermera como persona de
cultura, y como profesional competente.”
Otra asociación: Consejo Internacional de
Enfermeras (CIE) fundado en 1989 agrupa una federación de más de 130
Asociaciones Nacionales de Enfermeras (ANE), manifiesta: “cuidados de
enfermería de calidad para todos”, pionera en interesarse en cuestiones
ético-legales.
NANDA (antes llamada North American Nursing Diagnosis
Association) es una sociedad científica de enfermería cuyo objetivo es
estandarizar el diagnóstico de enfermería. Fundada en 1982 para
desarrollar y refinar la nomenclatura, criterios y la taxonomía de diagnósticos
de enfermería. En 2002, se convirtieron oficialmente en NANDA International (y
NANDA International, Inc. en 2011), en consideración del importante crecimiento
en el número de miembros fuera de América del Norte. Continúan usando
"NANDA" como parte de su nombre y como marca, debido a su
familiaridad. Actualmente ya no es un acrónimo para "Norteamérica".
Otras asociaciones:
· ADEX: Asociación de Diplomados de
Enfermería en el Extranjero
· ADECI: Asociación Argentina de Enfermeros
en Control de Infecciones. (Argentina)
· AECAF: Asociación de enfermería de Capital
Federal. (Argentina)
· AECRA: Asociación de Enfermería de la
Ciudad de Buenos Aires.
· AEEVH: Asociación Española de
Enfermería Vascular y Heridas (España)
· AESM: Asociación Española de
Enfermería en Salud Mental (España)
· ALE: Asociación de Licenciados en
Enfermería. (Argentina)
· FAECAP: Federación de Asociaciones de
Enfermería Comunitaria y Atención Primaria (España)
· FAECRA: Federación de Asociaciones de
Enfermería Comunitaria de Argentina
· Licenciatura de Enfermería: Página de
los Licenciados de Enfermería de ANTOFAGASTA (Chile)
· SEEI: Sociedad Española de Enfermería
Informática e Internet.
MODELOS TEÓRICOS DE ENFERMERÍA.
Un modelo de cuidado es una estructura del conocimiento de enfermería formada por un marco de referencia (o marco teórico) y una metodología.
De esa forma, los modelos de cuidado engloban un conjunto de conocimientos para calificar y perfeccionar la praxis de la Enfermería.
El desarrollo de enfermería como disciplina profesional es muy reciente ya que elabora su propio cuerpo de conocimientos a partir de las investigaciones de Florence Nightingale que establece los fundamentos de nuestra actividad enfermera realizando los primeros trabajos que marcan nuestros orígenes como profesión y forman el núcleo a partir del cual se desarrolla la Ciencia Enfermera.
Está enfocado a dar respuesta a las necesidades de atención
Existen diversas clasificaciones de los modelos teóricos enfermeros.
A continuación, se describen algunas de las más utilizadas e influyentes.
Otras clasificaciones:
Clasificación basada en los conceptos, ideas y postulados que los modelos teóricos tienen en común. Se trata de una clasificación genérica y amplia que identifica tres paradigmas.
• Categorización: se orienta hacia la salud pública y hacia la enfermedad.
• Integración: con una atención centrada en la persona.
• Transformación: orientado hacia la persona unitaria en interacción con el universo.
Líderes de enfermería.
Florence Nightingale: 1820 Florencia, Italia-1910 Londres, Reino Unido.