Educación para la salud
La estrategia de la atención primaria de la salud
pretende que el individuo y la comunidad
conozcan, participen y tomen decisiones sobre su propia salud, adquiriendo así responsabilidades sobre ella.
La única forma posible en que esto se realice es que la comunidad pueda tomar conciencia de cuál es su
situación, qué problemas ha de resolver por sí misma y sobre qué aspectos
tiene derecho a exigir solución a nivel central.
Esta toma de conciencia no es espontánea, es necesario propiciar espacios de discusión y reflexión sobre
aquellos problemas que más afectan a la comunidad. Por
tal motivo es necesaria la educación para la salud como instrumento para
implicar responsablemente al individuo y la comunidad en la toma de decisiones
en defensa y promoción de la salud, para así generar el desarrollo de todas las
potencialidades que transforman al individuo y la comunidad en dueños de su
propio destino, en constructores de
alternativas y soluciones.
La educación para la salud es un proceso que logra que la población
se apropie de nuevas ideas, utilice y complemente sus conocimientos para así
estar en capacidad de analizar en situación de salud y decidir cómo enfrentar
mejor en cualquier momento sus problemas
Es importante porque:
1.
Intenta fomentar
la organización comunitaria mediante la reflexión crítica de aquellos factores
sociales, políticos y ambientales que inciden en el estado de salud de la
población en función de acciones concretas y organizadas para transformarla
2.
Propicia y
estimula un espacio de intercambio entre distintas formas de saber tales como
el conocimiento técnico- científico y otras formas de conocimiento local a
través de un diálogo democrático entre ellos.
3.
Al involucrar a
la comunidad en actividades de salud, va ganando experiencias de participación y,
por consiguiente, abre camino hacia otras formas de comprometerse con su propio
desarrollo.
Relaciones entre el personal de salud y la comunidad
el acercamiento de los
trabajadores de salud a la comunidad como meta principal del proceso de
educación la educación para la salud es una tarea difícil no sólo porque
habitualmente el personal de salud que ha de llevar la a cabo no se encuentra
capacitado para ella sino también por no ser un trabajo que produzca resultados
inmediatos. A esta dificultad se agrega la presión de la población que requiere
soluciones a sus problemas actuales de salud es decir medicina curativa, Para
cumplir con el objetivo se requiere un cambio de actitud del personal de salud,
el cual debe aprender a escuchar dialogar y aprender de los demás, Así como
compartir sus propios conocimientos.
El diálogo permite entrar en contacto con otras formas de
conocimiento otros caminos y facilita a la población el conocimiento sobre el
trabajo del equipo de salud, sus dificultades y limitaciones, para camino
conjuntamente.
Desde el momento que la gente se siente escuchada comprendida con
espacio para decidir sobre su salud puede aceptar responsabilidades frente a
ella.
El éxito de la educación en salud sólo puede alcanzarse en la medida
en que el personal sanitario logre captar la confianza y participación de la
comunidad en los trabajos de promoción de la salud, y esto sólo es posible si
se trabaja en función de sus necesidades, anhelos e inquietudes.
El rol del educador en salud comunitaria
Una de las funciones del educador es poder generar conciencia crítica que derive en decisiones organizadas
sobre problemas concretos que afectan a la población
Generar conciencia crítica implica el esfuerzo de desarrollar la
propia conciencia.
Evaluar
las prácticas de enseñanza, los aciertos y limitaciones, las diferencias
culturales con los participantes que impiden o aportan al proceso educativo,
debe asumirse como un ejercicio permanente del educador
El personal de salud que trabaja en la atención primaria de la
salud se ve en la necesidad de integrar las actividades
de salud con la cultura la producción la educación la problemática de la
mujer el desarrollo de la organización etcétera.
Funciones importantes para el mejor desempeño del trabajo del
educador en salud:
●
Lograr canalizar y conducir las situaciones conflictivas
improductivas y no si vas hacia un diálogo reflexivo al interior y entre
el equipo de salud y la organización de la comunidad
●
Fortalecer el rol del
trabajador básico de salud en las comunidades
●
Motivar a las personas que integran el equipo
de salud a que periódicamente discutan y revisen el
funcionamiento de las acciones de salud, buscando que éstas estén
estrechamente relacionadas y sean apoyo concreto y práctico a otras iniciativas
que, en otros campos, intentan mejorar las condiciones de vida de la población.
●
Fortalecer el
desarrollo basado en la autodeterminación y evitar modelos que impliquen
dependencia es decir dotar a la población de
herramientas apropiadas que le permitan conducir su propio desarrollo.
●
Apoyar la formación de las personas que
integran el equipo de salud discutiendo conjuntamente el diseño de los
programas educativos su orientación, sus materiales de apoyo, sus limitaciones
y el conjunto de aspectos que dificulta el conseguir la aceptación y
participación activa de la población en la implementación de los mismos. (Pág.
82 modulo 7)
Sus escenarios principales los medios masivos, las
instituciones comunitarias las instituciones educativas los servicios de salud
“Una
estrategia ineludible es la implementación de acciones de comunicación social
tanto en medios masivos como en actividades a nivel local destinadas a informar
y empoderar a la población incrementando la conciencia respecto de sus derechos
y promoviendo conductas saludables.” (texto del Plan Federal-pág. 24)
La construcción de la salud de una comunidad requiere de
la participación de múltiples actores. La de los integrantes de la comunidad,
la del equipo de salud y la de otros sectores como educación, acción social,
las iglesias de diversas religiones, las uniones vecinales o de fomento todos
ellos imprescindibles para aunar esfuerzos y complementar acciones que permitan
una construcción colectiva de salud.
El contacto cercano con la comunidad hace mucho más visibles los
problemas y su naturaleza. En este marco el aporte del funcionamiento en Red se
constituye en un soporte para dar respuestas.
Principios de la educación para la salud
El principio de beneficencia tiene que ver con la
educación y la provisión de las herramientas necesarias para que una persona
pueda obtener el mayor beneficio para su salud.
El principio de autonomía tiene que ver con la
capacidad de decidir sobre la salud que tienen las personas, si es que están
educadas.
El principio de equidad sostiene que, a una igual
necesidad en salud que tienen dos o más personas, debiera existir igual
oportunidad de resolución.
Objetivos de la educación para la salud
- Lograr que la salud sea un valor reconocido por la sociedad.
- Ofrecer conocimientos y capacidad práctica para generar comportamientos
saludables.
- Integrar en
la práctica habilidades para el trabajo con grupos y en la comunidad.
- Favorecer la correcta utilización de los servicios sanitarios.
- Promover
el análisis, la reflexión y la investigación sobre los factores que
intervienen en los comportamientos.
- Orientar la
utilización de los instrumentos y los medios de apoyo a favor de la salud.
Si se analiza
históricamente la implicancia en el cuidado de la salud de la gente por parte
de los sistemas sanitarios del mundo, se observa que la mayoría se ha dedicado
y se dedica a asistir aquella porción de la población que acude a dicho sistema
-la morbilidad conocida- quedando fuera del sistema una gran cantidad de
afecciones o riesgos no reconocidas/os por la gente. Es decir, que hoy en día,
muchos países desarrollados orientan sus servicios médicos a resolver los
problemas de salud inmediatos, es decir a “curar” y no a prevenir.
Sin embargo y en
comparación a lo que los sistemas de salud pueden ver, los problemas de salud
de la población suelen ser muchos más amplios y complejos. Esto nos hace
lamentar la ausencia de la toma de acciones inherentes a la atención primaria,
entendida estas como aquellas acciones tendientes a evitar la aparición y/o
desarrollo de determinadas problemáticas de salud en una comunidad. Tal vez, sea
porque estas medidas en general, expresan su impacto a mediano o largo plazo y
esto no suele ser “redituable” en términos electorales para las figuras
políticas que se encargan de la gestión durante esos pocos años, situación que
se repite constantemente en nuestra región y especialmente en Argentina.
Como se observa en la
figura 1, los problemas de salud no sólo constituyen la parte visible del
iceberg, es decir aquellos pacientes que consultan al sistema, sino también su
parte oculta –aquellos pacientes que no acuden al sistema, así como aquellos
que aun estando sanos son vulnerables por los factores de riesgos a los que
están expuestos. Vulnerabilidad que podría eliminarse o reducirse con la
intervención del sistema, mediante actividades de promoción y prevención.
Por lo tanto, podemos
concluir diciendo que los sujetos de intervención de un sistema de salud es
toda la población y no solo la parte visible. El cuadro 2 resume los ámbitos
donde puede realizarse promoción de la salud.
Ámbitos donde puede realizarse promoción de la salud.
●
Comunidad
●
Medios
de comunicación
●
Adultos
●
Escuelas
●
Fuera
del sistema (ej. desescolarizados o desempleados).
●
Lugares
de trabajo –salud laboral–
●
Consulta
médica –consejería–
●
Pacientes
crónicos
●
Personas
con problemas de drogodependencia
● Hospitales
Salud mental
La salud mental es el
bienestar emocional, psíquico y social que permite llevar adelante los desafíos
de la propia vida y de la comunidad en la que vivimos.
Reconocer y entender los padecimientos
mentales es un importante primer paso para romper con estereotipos y falsas
creencias, superando así los prejuicios y la estigmatización hacia las personas
con enfermedad mental.
Es importante que sepas
●
Contrario
a lo que se cree, los padecimientos mentales no son un problema poco frecuente.
Estudios de la O
●
MS/OPS dan cuenta de que los trastornos
mentales están dentro de las cinco primeras causas de enfermedad en América. El
alcohol y la depresión son los problemas más frecuentes en salud mental.
En Argentina, 1 de cada 3 personas presenta un
problema de salud mental a partir de los 20 años. Las problemáticas más
frecuentes son los trastornos de ansiedad, del estado de ánimo y los problemas
por consumo de sustancias (UBA APSA OMS MSAL – 2015)
●
El
padecimiento mental no es irreversible: puede afectar
de modo parcial y transitorio la vida de una persona. Con el apoyo comunitario
necesario, la recuperación es posible.
●
Las
personas con enfermedad mental no deben ser aisladas de su comunidad:
todas las personas tienen derecho a recibir la atención sanitaria necesaria,
acompañadas de sus afectos y en su comunidad. Ninguna enfermedad se cura con el
aislamiento y el encierro. Nadie debe vivir en un hospital psiquiátrico.
●
Las
personas con padecimiento mental no son ni violentas, ni peligrosas: no
existe una relación directa entre padecimiento mental y violencia. La
existencia de esta última está más relacionada con el desamparo y el
aislamiento social. Detrás de cada persona hay una historia que determina su
presente.
●
La
salud mental no debe atenderse de forma diferente de la física. La
salud es una sola, y su abordaje debe realizarse en los centros de salud y en
los hospitales generales.
Cómo ayudar
La discriminación genera una mirada negativa sobre
las personas con padecimiento mental. Cambiar nuestra actitud es fundamental
para que las personas que lo sufren puedan integrarse en la sociedad.
●
No tengas miedo de las personas con
padecimiento mental.
●
Escuchar y respetar las diversas formas que
tienen de expresar sus sentimientos.
●
Acompañar a ellas y a sus familias.
●
Tener en claro que las situaciones por
consumos problemáticos de sustancias son problemáticas de salud, no de
justicia. No deben abordarse desde una perspectiva policial para evitar la
criminalización de los consumidores problemáticos.
●
Llamar a las personas por su nombre, no por la
enfermedad que padecen. Alguien con esquizofrenia no es un/una
“esquizofrénico/a”.
●
Tener en cuenta que cualquiera de nosotros/as
puede atravesar un padecimiento mental. Puede
ser un amigo, un familiar, o uno mismo.
Recordar
Una
de cada cuatro personas en el mundo padece algún tipo de trastorno mental según
la Organización Mundial de la Salud (OMS). De éstos, dos tercios no reciben ningún
tipo de atención. A su vez, quienes la reciben, se encuentran mayoritariamente
internadas en hospitales o clínicas psiquiátricas.
El encierro y aislamiento en estas instituciones,
contribuyen a la pérdida de habilidades sociales, generan dependencia, y son
contrarias a los derechos humanos.
Desde la Dirección Nacional de Salud Mental y
Adicciones trabajamos en la transición de un modelo basado en el encierro, a un
modelo de dispositivos inclusivos que les permita a las personas reinsertarse
en la comunidad.
Para proteger tu salud y prevenir enfermedades existe
una red de servicios de salud mental:
●
Hospitales Generales
●
Centros de Atención Primaria de la Salud
(CAPS)
●
Centros Integradores Comunitarios (CIC)
Tener en cuenta también que existen otros lugares y
espacios con personas que pueden escucharte, acompañarte y ayudarte, a vos, a
un familiar, un amigo:
●
Emprendimientos laborales productivos
●
Escuelas
●
Clubes barriales
● Iglesias.
Políticas y tendencias actuales de Salud Mental
Salud Mental Comunitaria en la Estrategia de Salud Familiar y
Comunitaria.
La Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657 es una norma que
garantiza el derecho de todas las personas a la atención efectiva y oportuna de
la salud mental.
Se reconoce a la persona con padecimiento psíquico como un sujeto
de derecho y plantea una modalidad de abordaje comunitario.
Se conceptualiza a la salud mental como un proceso determinado por
componentes históricos, socioeconómicos, culturales, biológicos y psicológicos,
cuya preservación y mejoramiento implica una dinámica de construcción social
vinculada a la concepción de los derechos humanos y sociales de toda persona.
Implica la promoción de la salud mental, la prevención y
atención de padecimientos mentales, la participación comunitaria y la detección
y el abordaje de los determinantes sociales de la salud.
Las problemáticas relacionadas con el padecimiento psíquico
constituyen eventos de relevancia en materia de salud pública, representando el
22% de la carga total de enfermedad en América Latina y el Caribe y presentan
una tendencia en aumento.
Estos eventos generan importante sufrimiento subjetivo y producen
consecuencias en la trama económica y productiva de las personas y comunidades,
con efectos invalidantes en la esfera vincular y social, contribuyendo a la
morbilidad, discapacidad y mortalidad prematura (Organización Panamericana de
la Salud, 2014; World Health Organization, 2017).
Distintos documentos internacionales coinciden en que, entre las
problemáticas más prevalentes con mayor impacto en la salud de la población, se
encuentran la depresión, las psicosis, el consumo problemático de drogas y
alcohol, el suicidio y las violencias (OPS, 2014; WHO, 2017).
Los Equipos de Abordaje Psicosocial en la Red.
En el marco de una Estrategia de Salud Familiar y Comunitaria
(ESFyC), que implica la creación de Equipos Interdisciplinarios, Núcleo y
Ampliados en el territorio, se establecen Equipos de Abordaje Psicosocial
(EAPS).
Su función es de apoyo matricial para el abordaje de la Salud
Mental. Por lo tanto, el desarrollo del trabajo de los EAPS implica un
funcionamiento en red y referenciado con otros equipos de salud en el armado de
proyectos terapéuticos singulares, según la población/territorio definido que
implicarán acuerdos entre los actores, un diagnóstico territorial, la
priorización de problemas y el explicación de vías de comunicación. Es
necesario entender la red como un espacio de mutua colaboración entre pares y
no como un ámbito de derivación y recepción de casos.
Son equipos del primer nivel de atención para el abordaje de las
problemáticas prevalentes en salud mental (depresión, ansiedad, consumos
problemáticos de sustancias, violencias, entre otras), así como trastornos
mentales severos. Los EAPS tienen el propósito de fortalecer a los Equipos de
Salud Familiar (ESF), mejorar la calidad de atención, la respuesta a la demanda
y la continuidad de cuidados de las personas usuarias.
Internación en Hospitales Generales
Desde el punto de vista jurídico, el acceso a prestaciones
sanitarias concernientes a problemáticas de salud mental constituye un derecho
amparado en la Ley Nacional de Salud Mental N°26.657 y en la Ley Nacional de
Derechos del Paciente N°26.529, y demás normativas nacionales e internacionales
tendientes a garantizar los derechos de los usuarios de los sistemas de salud /
salud mental.
Se encuentra ampliamente probado que el abordaje de la salud
mental dentro del ámbito de atención en un hospital general disminuye el riesgo
de segregación, cronificación, abandono y de abusos a la integridad psicofísica
de los usuarios, lo cual ocurre con mayor frecuencia en las instituciones
monovalentes. Sanitariamente, la existencia de un servicio de salud mental en
un hospital general favorece a un enfoque integral de los problemas de salud,
permite que se realicen interconsultas y fortalece la adherencia a los
tratamientos. La inclusión de la atención en salud mental en estas
instituciones, garantiza un mejor abordaje de la urgencia, disminuye tiempos de
internación favoreciendo la inclusión en la comunidad.
Guardias en salud mental de la Ciudad de Buenos Aires.
Hospital
General de Agudos Dr. Teodoro Álvarez
Hospital
de Emergencias Psiquiátricas Dr. Torcuato de Alvear
Hospital
General de Agudos Dr. Cosme Argerich
Hospital
Psicoasistencial Dr. José T. Borda
Hospital
General de Agudos DR. Carlos Durand
Hospital
de niños Dr. Pedro de Elizalde
Hospital
General de Agudos DR. Juan A. Fernandez
Hospital
General de Agudos Dra. Cecilia Grierson
Hospital
General de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez
Hospital
Neuropsiquiàtrico Dr Braulio A. Moyano
Hospital
de Enfermedades Infecciosas Dr. Francisco Muñiz
Hospital
General de Agudos Dr. José Penna
Hospital
General de Agudos Dr. Parmenio Piñero
Hospital
General de Agudos Dr. Ignacio Pirovano
Hospital
General de Agudos Dr. José María Ramos Mejía
Hospital
General de Agudos Dr. Bernardino Rivadavia
Hospital
General de Agudos Donación Francisco Santojanni
Hospital
Infanto Juvenil Dra. Carolina Tobar García
Hospital
General de Agudos Dr. Enrique Tornú
Hospital
General de Agudos Dalmacio Vélez Sarfield
Hospital
General de Agudos Dr. Abel Zubizarreta
Centro de salud
·
Centro.
De Salud Mental Y Acción Social Nro. 1. Manuela
Pedraza 1558, CABA
·
Centro de Salud Mental N° 3 Dr. Arturo
Ameghino. Av. Córdoba 3120, Buenos
Aires
Residencias Protegidas de Rehabilitación Psicosocial
- Nueva Pompeya (niños y adolescentes de 12
a 18 años)
- Avellaneda (niños y adolescentes de 12 a
18 años)
- Residencia Protegida Gorriti (Adultos de
18 a 65 años)
- Residencia Protegida Warnes (Adultos de
18 a 65 años)
- Residencia Protegida Pedro Goyena
(Materno – infantil /Madres con Trastorno Mental severo y sus hijos en
primera infancia)
Programas de
Inclusión
Normativa
Normas, leyes y derechos sobre salud mental.
Ley Nacional Salud Mental 26.657
Reglamentación de la Ley 26.657
Ley de Salud Mental de la Ciudad
de Buenos Aires Nº 448
Reglamentación de la Ley Nº 448
Otras normativas de la
Dirección General de Salud Mental:
- Convención
de derechos del niño y la niña
- Declaración
de Caracas
- Derechos
de personas con discapacidad
- Ley 447
Copidis
- Ley 153
básica de salud
- Ley 114
Protección Derechos del niño, niña y Adol CABA
- Tratados
internacionales DDHH
- Ley de
derechos del paciente
- Ley
Nacional de Prevención del Suicidio
Bibliografía.
·
Fuensalida. (2018). Abordaje de salud
mental en hospitales generales. Ministerio de Salud y Acción Social de la
Nación.
·
Ministerio de Salud de la Nación. https://www.argentina.gob.ar/salud/mental-y-adicciones/que-es
·
https://www.buenosaires.gob.ar/salud/saludmental